En el hogar hay muchos objetos de uso diario que pueden ser tóxicos o peligrosos para tus hijos. Es importante saber cómo prevenir las intoxicaciones y también qué hacer si piensas que tus hijos han ingerido algo peligroso.
Las unidades de emergencia de los hospitales reciben todos los días a niños que comieron o bebieron algún elemento tóxico o peligroso.
Mantener a tus hijos seguros en casa incluye asegurarse de que no ingieran por accidente algo que sea perjudicial para su salud. Debido a que hay muchos objetos en el hogar que pueden ser peligrosos para los niños —medicamentos, vitaminas, elementos de limpieza, baterías pequeñas y determinadas plantas—, es importante que todas estas cosas estén fuera de su alcance. Los armarios altos, cierres de seguridad para niños y compuertas para bebés son algunos modos eficaces de mantener a los niños alejados de objetos potencialmente peligrosos.
También es importante que leas atentamente la etiqueta de todo aquello que les des a tus hijos, por ejemplo, la dosis correcta de un medicamento. Las dosis por lo general dependen del peso y la edad del niño, o de las recomendaciones del pediatra.
Si tu hijo ha ingerido algo que no debía o quieres saber si algo puede ser tóxico, comunícate con el Sistema de Control de Intoxicaciones de California llamando al 1-800-222-2222. Allí te ofrecerán ayuda inmediata, gratuita y especializada para tratar tu caso, así como recomendaciones en caso de haber una exposición a sustancias tóxicas o venenosas. Haz clic aquí para obtener más información.
Por último, confía siempre en tu instinto y llama al 911 o dirígete de inmediato a la unidad de emergencias del hospital si crees que tu hijo necesita atención urgente.