Los maestros juegan un rol fundamental en la experiencia de los niños con el preescolar y sus logros escolares. Por eso es importante que tú y el maestro de tu hijo tengan una buena comunicación, para que ambos puedan ayudarlo.
Los niños aprenden más cuando sus padres participan activamente de su educación. Por eso es clave la colaboración entre la escuela y el hogar. Aunque tengas muchas ocupaciones y poco tiempo disponible, hay cosas simples que puedes hacer para apoyar a los maestros de tu hijo y contribuir a su educación preescolar:
Preséntate (o vuelve a presentarte) al maestro(a) el primer día de clases.
Habla con el maestro(a): en la escuela, a través de correos electrónicos, notas escritas o por teléfono para mantenerte al tanto de cómo le va a tu hijo.
Pídele al maestro(a) que se comunique rápidamente contigo si nota algún cambio en el comportamiento de tu hijo o si hay algún problema con él.
Mantente al tanto de las últimas novedades en la escuela de tu hijo a través de boletines informativos, jornadas de puertas abiertas y reuniones de padres y maestros.
¡Si puedes, ofrece tu ayuda voluntaria para el aula de tu hijo y averigua lo que está aprendiendo con tus propios ojos!
Consejo de los especialistas: Si tu hijo tiene dificultades en el preescolar, pídele a su maestro(a) si pueden establecer un registro diario o semanal de comunicaciones para mantenerte al tanto de lo que sucede día a día. Este registro puede incluir simplemente una carita feliz o triste para las distintas partes del día, acompañada de una breve nota que explique las dificultades y los logros. De esta forma, podrás hablar con tu hijo acerca de lo que le pasa y trabajar con el maestro(a) para apoyar sus estrategias pedagógicas desde tu casa.