Las habilidades motoras gruesas involucran el uso de músculos grandes de manera coordinada. Conoce más sobre estas habilidades importantes y cómo ayudar a desarrollarlas en tus hijos.
Las habilidades motoras gruesas son destrezas esenciales que involucran el uso de los grupos musculares más grandes —como brazos, piernas, pies y torso— para mover el cuerpo. ¡Con la práctica, los niños aprenden a desarrollar y usar las habilidades motoras gruesas para explorar el mundo que los rodea con equilibrio, coordinación, facilidad y confianza!
Algunos ejemplos de habilidades motoras gruesas son: sentarse, gatear, correr, brincar, tirar una pelota y subir las escaleras. Incluso el primer intento de los bebés para levantar la cabeza es un ejemplo de habilidad motora gruesa.
Hay muchas actividades simples y divertidas que puedes hacer con tus hijos para promover el desarrollo de las habilidades motoras gruesas. Estas incluyen:
Juegos para mover el cuerpo: saltar la soga, la rayuela, los juegos de persecución o el escondite.
Cuando estén en el parque, ayuda a tus hijos a tirarse por el tobogán, trepar escaleras o mover las piernas para columpiarse.
Enséñales a tus hijos a arrojar, atrapar y patear pelotas de distintos tamaños.
Ayuda a tu niño pequeño a construir un fuerte colocando algunas mantas sobre las sillas o cajas de cartón apiladas (¡usen cajas más grandes para armar túneles!).
Arma una pista con obstáculos acorde a la edad de tus hijos. Para los niños pequeños, apila almohadas, almohadones y mantas en el suelo, y anímalos a que trepen las “colinas”. Para los niños en edad preescolar, coloca un aro de “hula hula” en el suelo para que salten adentro o una caja vacía para que encesten la pelota.
CONSEJO BREVE: Evita pasar el tiempo frente a una pantalla, y ocupa el día con otros juegos y actividades. Mover el cuerpo es importante para desarrollar las habilidades motoras gruesas, ¡y además promueve el crecimiento saludable del cerebro!