¿Te da asco la idea de que tu niño juegue en el lodo, la tierra y las hojas? ¿Qué pasaría si te dijéramos que ensuciarse en la naturaleza tiene muchos beneficios para tu niño a nivel mental, físico y emocional? Continúa leyendo para aprender más sobre por qué ensuciarse en la naturaleza es algo bueno para tu niño. También tenemos consejos para jugar en la naturaleza de manera segura.
Desarrolla la regulación emocional
La regulación emocional se refiere a la capacidad de gestionar y controlar nuestras emociones en diferentes situaciones. Ensuciarse en la naturaleza puede ayudar a fortalecer la regulación emocional al brindar un ambiente seguro y divertido para que los niños sientan varias emociones y aprendan a superar sus sentimientos. Pueden sentir emoción, frustración, curiosidad o hasta enojo mientras exploran nuevas texturas, manipulan objetos y enfrentan desafíos durante el juego. Al enfrentar estas experiencias emocionales, aprenden a reconocer y manejar sus emociones, lo cual les da habilidades para manejar situaciones emocionales en la vida diaria.
Les enseña causa y efecto
Jugar ensuciándose en la naturaleza le permite a los niños experimentar y observar los resultados de sus acciones en tiempo real. Mientras interactúan con elementos naturales como el lodo, el agua, la arena o las hojas, comienzan a comprender las relaciones de causa y efecto que existen en la naturaleza. Por ejemplo, pueden notar cómo el agua cambia la textura de la arena o cómo las hojas caen de los árboles cuando sopla el viento. Desarrollar una comprensión de la causa y el efecto es importante para desarrollar el pensamiento crítico y una base sólida para el aprendizaje futuro.
Contribuye a un sistema inmunológico saludable
La flora intestinal saludable, o las bacterias buenas del sistema digestivo, tiene un papel clave en nuestra salud y bienestar general. Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, ayuda con la digestión e incluso puede mejorar la salud mental. Las investigaciones sugieren que la exposición a la suciedad y a las bacterias a través de juegos en la naturaleza puede ayudar a los niños a desarrollar una flora intestinal diversa y fuerte. Cuando los niños interactúan con la tierra, entran en contacto con varios microbios que promueven naturalmente un microbioma intestinal saludable, lo cual es esencial para desarrollar un sistema inmunológico fuerte y prevenir futuros problemas de salud.
Fomenta la resolución de problemas
El juego de ensuciarse en la naturaleza invita a los niños a enfrentar desafíos, resolver problemas y pensar críticamente mientras juegan. Por ejemplo, podrían descubrir cómo construir un castillo de arena resistente, descubrir varias maneras de usar un palo o explorar cómo se puede redirigir el agua con túneles en el lodo. Mientras se topan con problemas y encuentran soluciones creativas, practican habilidades de resolución de problemas que los ayudarán a lo largo de sus vidas.
Consejos para jugar y ensuciarse en la naturaleza de manera segura
¿Listo para sumergirte en la naturaleza con tu niño? A continuación te damos algunos consejos útiles y consideraciones de seguridad:
Encuentra un ambiente seguro y cómodo: Escoge un lugar en tu patio trasero, un parque local o una reserva natural cercana donde tu niño pueda explorar y experimentar de manera segura. Asegúrate de que el espacio esté libre de peligros como objetos puntiagudos, plantas tóxicas o fuentes de agua inseguras.
Anima a tu niño a explorar con cosas naturales: Ofrécele una variedad de cosas, como hojas, piedras, agua o lodo, para animar a tu niño a usar sus sentidos e interactuar con la naturaleza, dentro de límites seguros.
Mantente presente y participa: Acompaña a tu niño en su juego, haz preguntas abiertas y expresa curiosidad para ayudarlo a desarrollar su amor por el aprendizaje y la exploración. Tu presencia y supervisión aseguran que tu niño esté seguro mientras juega.
Establece límites y expectativas: Aunque jugar en la naturaleza puede ser una experiencia muy beneficiosa, asegúrate de establecer algunos límites para mantener a tu niño seguro. Enséñale a no comer objetos ni traerlos a la casa, háblale sobre la importancia de lavarse las manos después de su aventura en la naturaleza y establece reglas sobre tocar animales o insectos desconocidos para evitar posibles mordeduras o picaduras.
Prepárate para el clima: Viste a tu niño apropiadamente para las condiciones climáticas y ponle protector solar o repelente de insectos según sea necesario. El DEET, el ingrediente activo de muchos repelentes de insectos, es seguro para niños mayores de 2 meses y protege eficazmente contra mosquitos, garrapatas y otros insectos. Escoge una concentración de DEET del 10 al 30 % y aplícalo una vez al día sobre la piel y la ropa. Evita ponerlo en la cara, cortes, piel irritada y manos de los niños. Además, asegúrate de que tu niño evite jugar al aire libre durante condiciones de calor extremo o en mal clima.
Jugar a ensuciarse en la naturaleza puede ser una experiencia transformadora para tu niño. Entonces, prepárate, prioriza la seguridad y dile “sí” a explorar el aire libre con tu niño, sabiendo que eso contribuye a su felicidad, salud y éxito en la vida. California tiene algunos espacios naturales fantásticos, perfectos para jugar en la naturaleza. Aprovecha nuestro hermoso estado y prepara la base para experiencias que cambiarán la vida de tu pequeño.
